En esta ocasión, les mostramos a las personas que nos han explicado cómo fueron los comienzos de Alonso de Ojeda, donde hemos podido contrastar diferentes versiones de este mismo proceso, dependiendo de la ocupación que desarrollaron en este nuevo pueblo y mediante el testimonio de colonos, de obreros, comerciantes, mayoral...
Manuel Serrano Galván vino de Arroyo de San Serván, en 1969, cuando tenía 37 años y tres hijos. Cuando llegó a Alonso de Ojeda llevaba 6 años trabajando de mediero en en una finca de regadío, donde sembraba tabaco y pimientos.
"No me ha ido muy mal, pero no me ha ido muy bien porque, claro, cuando llegué aquí, lo del regadío lo conocía, pero resulta que la parcela me tocó muy larga, para la punta y, entonces, el agua estaba muy escasa. Iba algunas veces y, ni gota. Luego, al final, ni he debido a nadie nada, ni he hecho capital.
Horacio Barquilla y Antonia Rodriguez son de Madroñera, donde Horacio trabajaba de jornalero, pero estuvieron viviendo un tiempo en Palazuelo. LLegaron el 3 de Mayo de 1965, con cuatro hijos y conocían las técnicas del regadío, aunque no les hizo falta, porque Horacio llegó a Alonso de Ojeda como obrero, para construir el pueblo. Posteriormente se hizo cargo del estanco, del teléfono público y de la "botica" (iba a Miajadas a comprar los medicamentos que le encargaban).
"Lo que primero se empezó a hacer fueron las naves de las cuadras para que se metieran los obreros, para que no estuvieran en la calle o no se tuvieran que ir todos los días a su pueblo; las casas se hacían después. Ahí vivíamos nosotros, en las dependencias esas, hasta que ya se hicieron las casas. Estuvimos años así" (10/04/08).
José María Benavides Aragón fue el mayoral de Alonso de Ojeda. Llegó en 1969 y venía de ejercer el mismo cargo en Guadalperales. Allí estaban cuatro capataces pero, cuando los colonos accedieron a la propiedad de la tierra, se hizo una reestructuración permitiendo, únicamente, dos mayorales por pueblo.
"Yo controlaba todo el pueblo, lo que pasaba es que no visitaba todas las parcelas todos los días. Cada día iba a ocho o diez, allí me sentaba con él y comentábamos todo lo referente a la parcela, si había algún problema o cualquier otra cosa. También tenía que llevar el control o la administración, como lo quiera llamar, de todos los colonos: de lo que cogían, del ganado que tenían, de las vacas que se les entregaba, que tenían que pagarlo con una cría y, si era macho, tenían que pagar el 60% al Instituto. También tenían que abonar al Instituto el 60% de lo que recogían, de la cosecha. Las cosechas, pues, yo las tenía que aforar a pie, y de lo que yo les aforaba, tanto si me equivocaba yo, que les ponía de más o de menos, de lo que yo les pusiera tenían que pagar el 60%. Eso era el Período de Tutela".
José Antonio Álvarez y Consolación fueron los maestros de Alonso de Ojeda. Al principio había ocho niveles de la Educación General Básica, divididos en cuatro aulas, pues sólo había cuatro maestros. Las clases siempre se adaptaban al medio rural, así como los horarios: cuando llegaba la 'campaña' se reducía el horario escolar. A partir de mayo se implantaba la jornada de mañana para evitar el absentismo (por necesidad) en estos meses.
"Colonización, en aquel entonces, tenía un "concurso de méritos" a nivel nacional, era para todos los pueblos de colonización de toda España, lo que pasa es que tú te centrabas donde te interesaba, ponías preferencias. En estos méritos entraba el tiempo que llevabas ya en el cuerpo, si te gustaba el campo o no te gustaba, si tenías la plaza en propiedad o eras provisional todavía. Además, te hacían como una especie de test, rellenabas una encuesta que te daban en la que, entre otras cosas, te preguntaban si aun en condiciones difíciles seguirías ejerciendo tu cargo, poniéndote sobre aviso que la vida en estos pueblos que están empezando, no era fácil. Ellos tenían un baremo mediante el cual, al cabo de tres meses, te comunicaban si estabas admitido o no y, a continuación, tomabas posesión".
Gregorio Indias y Maruja llegaron el 18 de Julio de 1969. Venían de Feria, habían trabajado en el secano y tuvieron que emigrar a Alemania antes de solicitar el bar y el comercio. A ellos no les ponían requisitos, no era necesario, por ejemplo, que tuvieran un cierto número de hijos, únicamente tenían que solicitarlo y, una vez aprovado, se organizaba una subasta a "sobre cerrado", el que más dinero pujase se quedaba con los locales comerciales, siempre sin saber cuánto había puesto el resto.
"Aquí las familias tenían pocos recursos y, muchas veces, tenías que dar fiado hasta que recogían la cosecha. También a nosotros nos ayudaban más de lo que nos ayudan hoy, porque entonces los almacenes, sin conocerte, te fiaban... porque no había y yo tenía que ayudar a muchas familias aquí que no tenían, y así fuimos tirando. A mi me ayudaron, pero yo también tuve que ayudar a esas familias, porque no todo era color de rosas".
Agustín Vellarino y Fernanda Garrido venían de Oliva de la Frontera y tenían dos hijos. Ellos llegaron de los últimos, en 1972. Se habían dedicado siempre al secano, pero Fernando también tuvieron que emigrar a Francia y a Alemania. Al principio decidieron alquilar el bar de Gregorio Indias, siendo allí donde vivían. Años más tarde les dieron una casa de obrero y la parcela.
"Los comienzos fueron malos porque la parcela la habían desgraciado, la tierra buena la habían puesto debajo de la mala... luego fui arreglándola poquito a poco. Quitábamos la tierra mala, la enterrábamos y quitábamos la buena".
Juana Caro y Carlos Collado son de Miajadas. Llegaron a Alonso de Ojeda el 8 de abril de 1969, cuando Carlos tenía 44 años. Se habían dedicado siempre a la huerta, por lo que sabían desenvolverse en el regadío.
"Había muchos que nos se quisieron venir porque, según ellos, eso de ser colonos era una bajeza, cuando te decían colona era como un insulto".
Mencía Serrano llegó con 35 años, en 1969, venía de Campo Lugar y tenía tres hijos. Su marido conocía muy bien el regadío, poque llevaba bastantes años trabajando de jornalero en la finca "El Quinto".
"Nosotros vinimos el 13 de abril de 1969 y, entre el 8 y el 13, qu fue cuando nosotros vinimos, se llenó todo el pueblo. Vinieron todas las paisanas a ayudarnos. Arreglamos una habitación, porque esto daba miedo. El poyo de la cocina tenía ladrillos, cemento, de todo... Estuvimos raspando con espátulas y es que estaban las casas desgraciaditas. Entre todas arreglamos una habitación para poder dormir aquella noche; luego, poquito a poco lo fuimos arreglando".
Mercedes Vellarino y Miguel Contreras eran de Oliva de la Frontera. Llegaron el 31 de marzo de 1976, con 50 años, por lo que estuvieron a punto de rechazarles la solicitud. Tuvieron que emigrar a Francia y trabajaban(de forma remunerada) los dos, Miguel de hortelano y Mercedes de pintora.
"Cuando nosotros llegamos, el IRYDA ya no daba semillas, ni animales ni nada. Nos dejaron sembrar lo que quisimos; así que, al principio, pusimos tomates, maíz, pipas y algodón, pero el algodón no traía cuenta y las pipas las sembramos el año de la sequía. También nos controlaban menos la parcela porque nosotros ya no les tuvimos que pagar, no nos la aforaban".
martes, 8 de julio de 2008
Entrevistados en Alonso de Ojeda
viernes, 4 de julio de 2008
Entrevistados en Casar de Miajadas
Antonio Mogollón llegó a Casar de Miajadas con 32 años, en 1966 y venía de Escurial, pero llevaba 16 años trabajando en Ciudad Real, en el carbón. Tomó la decisión de venirse porque en la finca donde vivía, no disponían de ningún tipo de servicios, al pueblo que tenían más cerca tardaban en llegar tres horas en burro.
"Aquí, a este pueblo vino mucho personal, buena gente y toda trabajadora, pero el IRYDA metió la pata. Lo primero es que hicieron las parcelas muy chicas, de cuatro o cinco hectáreas, malas tierras y no daban rendimiento. Nos vimos negros para criar a los hijos, porque hasta que no pasaron unos años... bastantes, no empezamos a tirar para adelante. Y, al principio, yo estaba a hacer alguna para que me echasen, porque no podíamos ni comer aquí. Luego ya nos hemos alegrado mucho de estar aquí" (11/04/08).
"La cosa es que nosotros nos hemos defendido, porque aquí se tuvo que ir la mitad de la gente. Un año nos quedamos sólo 14, había días que te levantabas y te decían: 'pues esta noche se ha ido fulano, esta noche se ha ido mengano. Porque con cuatro o cinco hectáreas no se podía vivir ¡y mira que ha habido gente buena y trabajadora aquí!...pero no se podía" (11/04/08).
Angel Serrano vino de Zurbarán, con tres hijos. Al ser colono de 2ª generación, conocía a la perfección las técnicas del regadío, así como el funcionamiento de estos nuevos pueblos. Fue presidente de la Junta de Colonos en Casar de Miajadas a principios de los años 80.
"Yo soy hijo de colono. Y yo, a la colonización, vine antes que ellos, por lo menos a estos pueblos, porque llevaba ya 15 años en Zurbarán, allí me casé. Cuando llegué de Zurbarán, este pueblo estaba hecho sólo al 50%. Me tocó también trabajar en la obra, me tocó sacar para adelante el pueblo; y es que este pueblo se acabó de rematar en el 81, todas las casas de obreros, de colonos, algunas hay sin terminar. Entonces fue cuando se terminó la Iglesia. Hasta entonces se habían estado haciendo aquí, en la cooperativa, las misas, los bautizos y todo".
Juan Francisco Rodriguez procedía de Siruela, llegó cuando tenía 36 años, en 1966 y con tres hijos. Se había dedicado siempre al campo, pero al ecano, por lo que no conocía el regadío.
"El perjuicio para estas tierras fue que las habían nivelado, lo hicieron fatal".
Juana Sánchez Moreno procede de Garganta La Olla. Llegó a Casar de Miajadas en 1966, con 30 años. Tiene cinco hijos. Su marido era de Pasarón de la Vera y, antes de trasladarse a este pueblo, era encargado de una finca cerca de Talavera de la Reina, por lo que sabía cómo se trabajaba el regadío. Juana no estaba de acuerdo con la decisión que tomó su marido de empezar una nueva vida en este pueblo y le costó mucho adaptarse.
"Aquí no había nadie, ¡si los mayorales han venido después que nosotros! Cuando nosotros llegamos estaba el pueblo a medio hacer, y los que vivían aquí eran los albañiles y los colonos que iban vinierndo. Las casas estaban medio hechas. No había ventanas, teníamos que tener mantas puestas en las ventanas. Ahí, en el water, como estaban en obras, pues yo puese muchos bloques en la ventana del servicio para que no me entrara luz ni me entrara nada, y en la cocina igual. Así que venir aquí, que ni había escuela entonces, ni había agua, ni había luz, ni había médico, y las calles... que había que ponerse botas de goma hasta las rodillas para poder entrar en casa... yo me eché a llorar y todavía no he dejado de llorar"(24/04/08).
Concepción Ambrona y Antonio Contador llegaron el 23 de Febrero de 1969, venían de Cheles y tenían tres hijos. Antonio era mozo de mulas, pero tuvo que emigrar a Alemania, por lo que la decisión de solicitar una parcela fue apoyada por Concepción. No conocían el regadío.
"Cuando nosotros llegamos el pueblo estaba todo hecho y ambueblado (de gente). Había muchísima gente, lo que es que luego se han ido yendo, ahogados de sacar tanto dinero del banco y no poder pagarlo. Se iban porque no podían vivir. Porque las parcelas eran chiqutitas y las cosas valían baratas. El kilo de tomates valía una peseata, y los abonos siempre ha habido que pagarlos, pagar rentas, etc. Nosotros hemos tirado 'a pelo y a pluma'. Yo he ido incluso a vender por ahí, en un R-6 que teníamos. Mi marido también ha ido a la fruta y también teníamos vacas" (28/04/08).
Sebastiana Chico llegó en 19687, cuando tenía 42 años. Proceden de Navlvillar de Pelas. Vivían en una finca de secano, por lo que no conocían el regadío. Estaban con los padres de Sebastiana y con sus cuatro hijos.
"A mí, la idea de venirnos para acá, me pareció muy mal al principio, pero luego me he alegrado. Estuvimos aquí sufriendo, porque no podíamos sembrar más que lo que ellos querían además, las parcelas eran muy pequeñas, pero luego tuvimos la suerte de que nos la agrandaron, y ahora tenemos 14 hectáreas" (28/04/08).
Antonio Albalá fue el Mayoral de Casar de Miajadas. Venía de Córdoba, donde se dedicaba a la agricultura y tenía cuatro hijos. Hizo el curso de capataz en Lérida. Cobraba 4.000 pesetas al mes, le daban la casa que él eligiese y un huerto de 0'75 áreas. Cuando llegó al pueblo, en 1967, ya había muchos colonos viviendo allí.
"El ingeniero me madaba la lista de los colonos que iban a venir el día que fuera y el sorteo lo hacíamos aquí: metíamos todas las papeletas de las parcelas que se iban a dar y cada uno sacaba la suya; yo se lo anotaba, le dábamos la parcela y luego ya, posteriormente, cuando se le hacía entrega de la parcela, pues se visitaba, le medíamos la tierra y lo que tenía que sembrar de una cosa, de la otra y de la otra, y les distribuíamos el terreno para que sembraran ellos. Luego ya les íbamos explicando lo que tenían que echar a cada cultivo... Y es que, aquí, había muchos que venían y no tenían ni idea de riego, ni de abonado, ni de nada. Pero luego, a la hora de aprender, hay quien tardaba más y con una parcela buena no producía, y hay quien tardaba menos y con una parcela mala producía más que aquel" (10/04/08).
Proyecto del Nuevo Pueblo de Alonso de Ojeda
Hemos realizado un resumen del proyecto sobre la constitución de Alonso de Ojeda donde prodréis encontrar una valoración de los lotes, los edificios que comprende el proyecto y su presupuesto, incluyendo el cementerio aunque no llegara a construirse, además de una descripción detallada de los mismos. También podéis ver reflejado el Plan de Explotación del año 1970, el personal del Instituto que trabajaba en el pueblo, los integrantes de la 1ª Junta de colonos, la población y los servicios con los que contaba el pueblo en esos años y algunos otros datos de caracter económico.
jueves, 3 de julio de 2008
Entrevistados en Pizarro
Queremos presentarles en esta ocasión a las personas que, hasta ahora, nos han regalado sus testimonios, haciéndonos comprender mejor cómo fue el proceso de asentamiento en Pizarro.
Luis García Fuentes. Fue la primera persona a la que entrevistamos en Pizarro (08/04/08), donde lleva viviendo 44 años. Llegó con 33 años, en 1964, y conocía las técnicas del regadío.
"Soy de Badajoz, nacido y criado. Yo estaba de encargado en una finca allí, en las 'Merenillas', donde sembraba algodón, cultivos... y llevaba la parcela también. Yo enseñé a mucha gente aquí, porque me había criado en el regadío".
Alfonso Sánchez y Catalina (entrevistados el 08/04/08). Fueron de los primeros en llegar, cuando todavía no se había terminado de construir el pueblo y sin
apenas pertenencias...
"Yo me dedicaba al campo, pero no como aquí. Mi señora y yo estábamos en una huerta los dos en verano y, cuando llegaba el invierno, de donde las podíamos coger, de donde salía, porque no quedaba otra, estaba la cosa muy mala. Al principio era muy dificil. Yo aquí no traje nada, vine con una bicicleta pero, cuando pasaron tres o cuatro años, yo tenía todas mis cuadras llenas de ganado además, cogía muchísimo en mi parcela".
Damiana Blázquez Tardío llegó unos años más tarde, en 1966. Venía de Abertura, casada, con cuatro hijos y tenía 42 años (la edad límite para poder acceder al lote era los 50 años) y no sabían trabajar en el regadío. Como la mayoría de las mujeres en estos nuevos pueblos, trabajaba todos los días con su marido en la parcela.
"Vinimos por la necesidad, nosotros teníamos un poco de tierra pero vamos... cogíamos para mal comer. Pasamos mucho aquí, hemos trabajado como negros, como esclavitos, nos íbamos a la parcela por la mañana y veníamos por la noche". (06/05/08)
José López García llegó en 1964, con 24 años. Es Alconchel, pero venía de Vegas Altas, como hijo de colonos. Trabajó en los primeros años como tractorista del IRYDA, pero luego solicitó una parcela.
"Estuve de tractorista ocho años. Con el tractor ganaba 150 pesetas al día, pero eso era para el Instituto, a mí me daban sólo 105, más las horas extraordinarias, que me obligaban a estar, a veces, hasta casi veinte horas montado en el tractor. Me obligaban porque... el tractor estaba para este pueblo, pero tenía que ir a labrar al Casar de Miajadas y había veces que también a la Puebla, a echarles una mano... ¡y eso era imposible, me dormía encima del tractor!". (06/05/08)
Antonio Tejera y Josefa Fernández llegaron el 9 de Marzo de 1964. Venían de Villamesías, con 33 y 32 años respectivamente y con tres hijos. Ellos también conocían las técnicas del regadío.
"Aquí, al principio, sembrábamos algodón, tomates y pimientos, pero con otros conocimientos muy distintos a los de ahora. Entonces una hectárea de maíz, tanto allí como aquí, te salía por 6, 7 u 8.000 kilos, y hoy ya está la hectárea de maíz en 14 o 15.000 kilos. En aquel tiempo, la hectárea de tomates que llegaba a 20.000 kilos era una gran producción, y hoy la tienes en 90 o 100.000 kilos ¡y eso es real!". (04/06/08)
María Torres y Juan Barquero (entrevistados el 04/06/2008) venían de La Guarda, con 5 hijos. Llegaron en 1964, también de los primeros, cuando el pueblo estaba sin terminar y Juan tenía 43 años. Decidieron soclicitar una parcela porque Juan se pasaba cinco o seis meses de cada año trabajando en Cataluña o en el País Vasco. A María le gustó la idea de irse a vivir a uno de estos nuevos pueblos (cosa que no suele ser habitual entre las mujeres pues, por lo general, a ellas les costaba bastante más adaptarse a esta nueva situación, y se iban de sus pueblos de origen "obligadas" por la decisión que habían tomado sus maridos).Ellos también sabían trabajar el regadío.
"Las tierras eran buenas, estaban bien, pero muy mal niveladas. Ha habido que nivelarlas, pero eso ha sido por cuenta mía. Los primeros años nos la araba el Instituto, tú llamabas al tractorista y luego le pagabas. El primer año nos araron un bancal, pero eso te lo cobraban multiplicado, porque te cobraban el tanto por ciento de todos los cultivos que cogías, vamos... lo que el mayoral quería poner".
lunes, 23 de junio de 2008
Exposición sobre el Proceso Colonizador en los Diferentes Pueblos
Con motivo de las Fiestas de los pueblos que estamos estudiando, se llevará a cabo una exposición con parte del trabajo que llevamos realizado. En esta exposición reflejamos el proceso de asentamiento en los tres pueblos, siempre partiendo de la experiencia de sus protagonistas.
Tambien tenemos programada la proyección de un documental del año 1971 titulado "La Conquista de una Vega", este documental refleja las actuaciones del I.N.C. en la transformación de la Vega del río Guadiana en Badajoz.
En esta exposición mostramos fotografías de los primeros momentos, la llegada de los colonos, la construcción de los pueblos, sus fiestas... fotografías que han sido cedidas tanto por los habitantes de Alonso de Ojeda, Casar de Miajadas y Pizarro, como por la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural.
lunes, 16 de junio de 2008
Proyecto del Nuevo Pueblo de Casar de Miajadas
El primer proyecto que se redacta en cumplimiento de la orden de la Dirección General de 24/10/1960, determina que la composición del pueblo de Casar de Miajadas deber ser:
- 187 Vivienda de colonos de patrimonio familiar con sus dependencias agrícolas, para ejecutar 99 en la primera fase.
- 82 Viviendas de colonos de parcela complementaria, para construir 41 en la primera fase.
- Centro Cívico compuesto por los siguientes elementos;
b) Edificio administrativo con local de correos y dispensario médico en planta baja, un despacho y pequeño salón de sesiones en planta alta y vivienda del funcionario administrativo.
e) Casa almacén de la hermandad sindical, compuesta de hogar, biblioteca y aseo en planta baja y dos despachos en la planta superior, disponiendo de un amplio patio de 1500 metros cuadrados como mínimo para instalar de momento un cobertizo de maquinaria agrícola de 120 metros cuadrados de superficie y un almacén de análogas dimensiones, quedando el resto del patio para situar otras dependencias en el futuro.
f) Edificio social, con salón de actos, bar y casa-vivienda para el conserje encargado. La capacidad del salón será de 200 plazas aproximadamente. Se preverá salón contiguo para el establecimiento de cine de verano.
g) Hogar rural para la sección femenina y frente de juventudes.
En el 66 (14/11/1966) se redacta una nueva Memoria sobre la constitución de la nueva entidad municipal de Casar de Miajadas, en la que podemos apreciar que sólo se han construido las viviendas y edificios previstos en la primera fase.
La obra de terminación del pueblo de Casar de Miajadas, comenzó el 3 de Noviembre de 1982, según un nuevo proyecto redactado por el arquitecto Don Joaquín Pasdtor Pujó y aprobado el 21 de Enero de 1982, siendo adjudicada en Julio de este mismo año.
Aquí teneis un pdf con una sístesis de las diferentes Memorias, proyectos, pliego de condiciones y presupuestos, donde encontrareis con mayor detalle la descripción de las obras, las superficies de la demarcación, los núcleos afectados y un pequeño estudio social y económico de Casar de Miajadas.
jueves, 5 de junio de 2008
DATOS EXTRAÍDOS DEL ARCHIVO DE LA EXCMA. DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE BADAJOZ, SECCIÓN “PLAN BADAJOZ”
Aquí os dejamos un archivo en pdf con datos que nos dan una visión general de cómo se encontraban las poblaciones de Alonso de Ojeda, Casar de Miajadas y Pizarro entre 1956 y 1967.